El número de muertos en un hospital, o cómo evitar la torpeza humana

El número de muertos en un hospital, o cómo evitar la torpeza humana
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Hace un tiempo analizábamos el impacto positivo que tenía que los facultativos de un hospital se lavaran las manos a la hora de contabilizar las infecciones y muertes que se producían. Y es que los hospitales son lugares en los que se concentra tal cantidad de enfermos que cualquier cambio mínimo aumenta o disminuye la mortalidad.

Según un estudio publicado en el New England Journal of Medicine, emplear listas de verificación para controlar la seguridad en cirugía ponía en evidencia no solo lo importante de cualquier medida de asepsia, sino también lo falible que es la memoria humana.

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En todo el mundo se llevan a cabo unos 234 millones de operaciones al año. Es difícil calcular el porcentaje de fallecimientos derivados de complicaciones posquirúrgicas, pero he visto estimaciones que van desde el 1,5 por ciento al 5 por ciento, dentro de los 30 días posteriores a la cirugía. Si tomamos la cifra más baja, esto equivale a más de 3,5 millones de fallecimientos post cirugía atribuible a infecciones y complicaciones de seguridad.

Estas cifras son un promedio de diversos hospitales del mundo, no de un determinado país, que incluye hospitales de Toronto, Nueva Delhi, Manila, Londres y Seattle. Todos ellos participan en el programa de la OMS “Una cirugía segura salva vidas”.

Tras poner en marcha la lista de verificación o checklist, que permite ir, punto por punto, comprobando que todo se ha hecho como se debe hacer para minimizar los riesgos, sin confiar en que el cirujano y el resto de personal lo hará por sí mismos, la tasa de fallecimientos se logró reducir del 1,5 al 0,8 por ciento. La tasa de complicaciones pasó del 11 por ciento al 0,7 por ciento.

Estas listas de verificación permiten reducir la carga cognitiva del experto, que ya no debe usar su memoria para recordar cada paso. Por ello en la navegación aeronáutica se usa el típico check-list antes de despegar, paso a paso, como si profundamente torpes. Porque así de torpe puede llegar a ser nuestra mente.

Imagen | Fotos GOVBA

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