Chistes y humor sexista: cómo los interpreta cada sexo

Chistes y humor sexista: cómo los interpreta cada sexo
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¿Qué pasa cuando contamos chistes sexistas a mujeres y hombres? Los resultados del siguiente estudio revelaron que las bromas sexistas y no estereotipadas tenían el mayor impacto en las mujeres.

Las mujeres puntuaron los chistes sobre hombres como más divertidos que los chistes sobre sí mismas, los chistes sobre ellas como menos divertidos que como los hombres calificaron los chistes sobre ellos, y puntuaron los chistes sobre hombres como más divertidos que los hombres.

Humor sexista

Como también refirió este estudio, los hombres encontraron el humor sexista anti-femenino más aceptable y lo disfrutaron más que las mujeres.

También se sugería que el humor sexista resultaba más aceptable personalmente cuando lo comunicaba una mujer; que el sexismo hostil se asoció positivamente con la aceptación personal del humor sexista como inofensivo; y que la aceptación social percibida se asoció positivamente con la aceptación personal del humor despectivo como inofensivo.

El humor sexista actúa como un 'liberador' de prejuicios, y según algunos estudios, los chistes sobre rubias o mujeres conductoras, por ejemplo, pueden llevar a la tolerancia de sentimientos hostiles y discriminación contra las mujeres. También ocurre con los homosexuales, como señala este estudio, aunque no con lo políticos: reírnos de ellos con chistes no parece rebajar lo que consideramos sobre ellos.

Los problemas sociales, culturales y psicológicos que el feminismo de cuarta ola pretende abordar también son más complejos y más difíciles de comprender, lo que lleva a un desacuerdo entre las feministas sobre qué temas deben priorizarse. Por ejemplo, el uso del humor sexista. Los estudios al respecto ofrecen conclusiones cogidas con pinzas, y muchas veces contradictorios.

Como épocas anteriores del pensamiento feminista, la cuarta ola no es un movimiento homogéneo. Las organizadoras de muchas marchas de mujeres señalan que están haciendo campaña por “quienes creen en un mundo equitativo, tolerante, justo y seguro para todos, en el que se protejan los derechos humanos y la dignidad de cada persona”, pero hay diferencias de opinión sobre cómo sería ese mundo.

¿Debería ser un mundo donde imperaran límites sobre el humor? ¿Esos límites deberían situarse justo en el sexo?

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