Nuestro cerebro, nunca los cansaremos de repetirlo, dista mucho de ser una máquina perfecta de procesamiento de información. Los recuerdos son en realidad reconstrucciones que poco o nada se parecen a lo que en realidad sucedió. Solo vemos el 1% del espectro electromagnético y oímos el 1% del espectro acústico. También deberíamos contemplar continuamente una gran mancha negra delante de nuestros ojos, que es el punto ciego de nuestra visión de resultas de la ubicación del nervio óptico en la retina, pero el cerebro la disimila calculando un promedio.
Estas deficiencias son un incordio, pero también nos permiten disfrutar de los trucos de magia o de ilusiones ópticas que desafían el sentido común, como si de repente hubiéramos cruzado el espejo de Alicia. En el vídeo que encabeza este post podéis ver una espectacular recopilación de algunas de las mejores ilusiones ópticas cotidianas.
Vía | Youtube
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