Brasil actualmente está encabezando a los países del denominado tercer mundo en lo que respecta tanto a las políticas económicas como a las políticas ambientales. Pocos días antes de la conferencia sobre cambio climático en Bal , Indonesia, Brasil declaró que no está dispuesto a que los países ricos le impongan políticas ambientales. Se debe recordar que Brasil es uno de los países que emite anualmente mayor cantidad de dióxido de carbono en América, en particular por la tala indiscriminada de árboles en el Amazonas.
Un artículo publicado por las Naciones Unidas recomienda que los países en vías de desarrollo corten las emisiones de carbono en un 20% antes de 2050, mientras que los países industrializados deberían hacerlo en un 80%. Brasil expresó que no está a favor de metas ya que se trata de una potencia emergente en el comercio, y líder en políticas ambientales, como demuestra el uso de biocombustibles y la preocupación global en preservar el Amazonas.
En la conferencia de Bali, Brasil defenderá la postura de que los países ricos son los que deberán pagarle a los países pobres para que se adapten al cambio climático. También hará una campaña para que se transfieran nuevas tecnologías desde los países más industrializados a los países que actualmente dependen del carbón para generar energía.
El presidente de Brasil, Luíz Inácio Lula da Silva, dice que no aceptará lecciones de los países ricos en cuanto a cambio climático. Afirma que durante la reunión en Bali discutirá con seriedad el precio que los países ricos tendrán que pagar para que los países más pobres preserven sus bosques. "No es posible explicarle a un pobre que no puede cortar un árbol si a cambio no recibe el derecho al trabajo y a comer" expresó el presidente.
Via | O Globo (1) Via | O Globo (2) Más Información | United Nations Framework Convention on Climate Change
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