8 cosas sorprendentes de Alan Turing, el hombre que sentó las bases del primer cerebro electrónico

8 cosas sorprendentes de Alan Turing, el hombre que sentó las bases del primer cerebro electrónico
10 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
  1. Hace 4.100 generaciones, nació el homo sapiens. Hace 280 generaciones, nació la escritura. Hace 22 generaciones, la imprenta. Y sólo hace 3 generaciones, Alan Turing sentó las bases de un cerebro electrónico. Su película favorita era Blancanieves y los siete enanitos, y en 1954 murió de una forma que recordaba poderosamente a Blancanieves: se envenenó mordiendo una manzana con cianuro. Murió en su cama con sólo 41 años.

  2. Algunos rumores apuntan que a Turing no se suicidó, sino que fue envenenado. Poco importa ese matiz a efectos no jurídicos, porque en verdad Turing fue envenenado poco a poco por la crueldad con la que se abordó su declarada homosexualidad. Fue procesado en 1952 por homosexualidad y traición, dando con sus pies en la prisión de Reading: la alternativa era la castración química con estrógenos. Con todo, le inyectaron hormonas, que fueron la razón de que le salieran pechos y quedara impotente.

  3. En 2013, recibió un indulto póstumo por parte de la reina Isabel II a sugerencia del Gobierno, que actuó impulsado por petición popular.

  4. Fue un gran atleta. Una huelga de transporte no le impidió llegar a su escuela de Sherborne, pues cubrió los 100 km que le separaban de su casa con una bicicleta.

  5. En Sherborne se enamoró de su único amigo, Christopher Morcom, pero éste murió de tuberculosis bovina, y ello hizo que Turing renegara de Dios, considerara que todo tenía base material, y buscó la fórmula computacional que le permitiera algún día revivir el alma de su amado para instalarla en otro cuerpo.

  6. Su Máquina Universal, un dispositivo hipotético que podría llevar a cabo cualquier clase de operación matemática, incorporó el concepto de algoritmo, el conjunto de instrucciones definidas, ordenadas y finitas que permite realizar una actividad.

  7. Solía encadenar al radiador su taza de café para evitar que se la robasen. Llevaba el pijama debajo del abrigo. No leía periódicos. Caminaba con máscara antigás para prevenir la alergia al polen. Se abrazaba a su peluche cuando estaba decaído.

  8. Descifró el código secreto nazi Enigma durante la Segunda Guerra Mundial, contribuyendo así a poner fin a la guerra y a salvar miles de vidas. La máquina Engima fue inventada por el ingeniero alemán Arthur Scherbius y la empleaban los nazis para codificar mensajes durante la guerra.

Comentarios cerrados
Inicio