Este lunes entró en vigor una medida taxativa para evitar el exceso de contaminación ambiental que está sufriendo la ciudad de París: limitar la circulación rodada a los vehículos con matrícula impar. La capital de Francia ha movilizado a 700 agentes de policía para hacer cumplir la normativa y sancionar a los conductores que no la respeten con una multa de 22 euros.
El transporte público en la región parisina se ha podido utilizar gratuitamente todo el fin de semana y también este lunes para incentivar a los ciudadanos a dejar el coche en el garaje, como podéis ver en el vídeo que encabeza la entrada.
Vía | Sinc
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