En un mundo donde apenas nos atrevemos a recorrer el mundo sin la asistencia de un GPS, tal y como lo hacían los flaneurs decimonónicos, que se perdían por las ciudades transportados por la psicografía, un grupo de personas está tratando de resistirse al automatismo del viaje obligándose a dibujar cosas mientras se desplazan.
Cosas como penes gigantes. Es algo que, por ejemplo, ya hacen algunos runners en lo que se ha venido a llamar Running Drawing. Usando apps como Nike y otras que consignan tu recorrido, dibujan el contorno de un pene, tal y como podemos ver en el Tumblr de Claire Wyckoff.
Tal y como lo describe jocosamente Noel Ceballos en su libro Internet Safari:
Pollas gigantes que pueden incluir varias manzanas, zonas verdes o incluso algún que otro hospital. Claire Wyckoff planea estas rutas fálicas, se pone sus cascos y sale a recorrerlas gracias a la guía de Nike+. En esto han desembocado las aspiraciones panteístas de Google Earth. Dibujemos falos ciclópeos sobre el barrio y salgamos a correr por su contorno.
No todo se reduce a penes, naturalmente. Ya hay corredores que trazan formas para dibujar personajes de los Cazafantasmas o el videojuego Space Invaders.
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