Muchas personas prefieren ingerir un fármaco en una pastilla o sobre efervescente, pues éste se ha diluido en el agua, lo que facilita el tragarlo y, además, el sodio de estas pastillas favorece su absorción. Sin embargo, las pastillas efervescentes, como pudieran ser el paracetamol o el ibuprofeno soluble, tienen efectos secundarios.
Uno de ellos es que aumente hasta siete veces la probabilidad de desarrollar hipertensión en caso de que se consuman de manera regular. Es precisamente su cantidad extra de sodio la que produce la hipertensión, pues supera los niveles recomendados de este mineral.
Las pastillas efeverscentes, tal y como ya sugirieron un grupo de expertos de las universidades de Dundee y de Londres hace un par de años, incrementan un 16% el riesgo de sufrir un ataque al corazón o un infarto cerebral. En el estudio realizado se monitorizó a más de un millón de pacientes que consumían medicamentos efervescentes con y sin sodio añadido.
Por tanto, esta clase de fármacos deberían especificar la presencia de sodio en las etiquetas a fin de evitar problemas mayores a los pacientes con propensión a la hipertensión. Con todo, la Fundación Británica del Corazón anunció que era importante recordar que el trabajo se aplicaba a las personas que toman estas medicinas a diario, ello no quiere decir que un uso ocasional vaya a significar un peligro para la salud del corazón.
Vía | BBC Mundo